En la madrugada del 20 de enero, la policía local de Málaga tuvo que intervenir en un centro veterinario de la ciudad tras recibir una denuncia por una presunta agresión.
Según la información disponible, el presunto autor, parece ser que irrumpió en la clínica de forma violenta, empujando a la veterinaria del centro, dirigiéndose posteriormente a la zona de urgencias, para una vez dentro comenzar a golpear la jaula de hospitalización donde se encontraba un animal, al que sacó a la fuerza y presuntamente le propinó una patada. Según confesión del presunto agresor, a los agentes intervinientes, lo ocurrido se debía a que no podía dormir a causa de los ruidos procedentes de la clínica veterinaria
